
Yokohama III
El Parque Yamashita se extiende por 750 metros a lo largo de la bahía. A nosotros nos gustaron mucho los canteros, donde combinan flores de diferentes colores, ligustrinas y céspedes y nos sentamos a tomar mate mirando el agua frente al Hikawa Maru, un barco que ahora sirve de museo.
Mientras tomábamos mate vimos como realizaban maniobras de buceo junto al barco.
Otra cosa que salta a la vista es la Yokohama Marine Tower.
Seguimos caminando hacia Minato Mirai, área urbana costera cuyo nombre significa literalmente el puerto del futuro. Es una hermosa caminata al lado de las aguas sorprendentemente transparentes para ser mar.
En nuestro camino nos cruzamos de sorpresa con el Yokohama Oktoberfest. Aunque no entramos estuvimos mirando un poco y de caraduras le pedimos sacarle una foto a un muy particular promotor que estaba en la puerta…
Llegando al World Porters Mall hay una pasarela circular para cruzar la calle. Llamativa y simpática.
Y llegamos a Minato Mirai. Esta área tiene un parque de atracciones, museos, muchos shoppings, hoteles, espacio verde y agua. Todo lujoso, lindo y caro.
Si antes dijimos que el agua era transparente, acá ya no se entiende como un puerto puede tener el agua así.
El observatorio del Landmark Tower es uno de los más altos de Japón, a 273 metros de altura. La torre en sí tiene oficinas y un hotel y un shopping adyacente llamado Landmark Plaza.
Justo al lado están las Queen´s Towers y lo que se llama Queen´s Square que es como la plazoleta en medio. Esta zona es conocida por una enorme escultura de metal en forma de rulos.
Pero en el área no era la única escultura. Minato Mirai tiene muchas esculturas por todos lados.
Dentro del Landmark Plaza encontramos dos tiendas a destacar: una tienda Ghibli y una Pokémon. También hay una tienda que vende mucho merchandising de anime. En el momento en que fuimos era casi todo One Piece.
Ya de nochecita y con hambre nos cruzamos al shopping de enfrente (at!). Pasamos por la tienda Lego y nos perdimos un ratito.
Después de un paseíto nos metimos a comer sushi en Shimotakaido Asahisushi. La verdad que el sushi, si bien no era malo era tirando a normal. Para el precio en carta, menor calidad de la que esperábamos. PERO nos dimos uno de los gustos culinarios del viaje: comimos Fugu (pez globo, el del venenito), pensamos que no iba a tener mucho sabor y la verdad es que estaba bárbaro.
Salimos ya de noche para deleitarnos un rato con las hermosas luminarias nocturnas de esta bella zona costera y encaramos a la Estación Yokohama para regresar a casa. El camino fue más largo del que habíamos calculado. Llegamos casi con el último aliento.

