Chiyoda-Akihabara
Este día comenzó nublado, continuó con lluvia y terminó en diluvio.
Primero fuimos a Chiyoda, al Parque Kitanomaru. Es un parque público al lado de los terrenos del Palacio Imperial (que estaba cerrado, por lo que no pudimos ir al Jardín del Este del Palacio).
Camino allí nos cruzamos con otra de las cosas curiosas que solo podrían suceder en Japón: un terreno baldío, cerrado con rejas, con 3 máquinas expendedoras en perfecto funcionamiento, sin rayar, sin dañar, sin robar…
El parque Kitanomaru se abre en la puerta Kitahanebashi-mon.
El camino que lo cruza está bordeado, por un lado, por el Nippon Budokan Hall (Construido para los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964, se utiliza para grandes eventos deportivos y otros acontecimientos), el Museo de las Ciencias y el Museo Nacional de Arte Moderno y, por el otro, por un estanque rodeado de árboles.
Saliendo del Kitanomaru, se cruza por un pasaje elevado para llegar a los fosos del Palacio Imperial.
Tras un paseo y una parada técnica para recuperar fuerzas, nos encaminamos hacia la Iglesia Ortodoxa Rusa (por si les sirve el dato, la comida en un barcito del parque es rica y barata, está más o menos en frente del Nippon Budokan Hall).
De camino y de casualidad, pasamos por la Waterras Tower. Dos torres de vidrio increíblemente modernas con una escultura en su entrada que algún fanático de Evangelion encontrará similar a las alas de Adán cuando explota.
Y llegamos a la Iglesia. Muy lejos de nuestras creencias religiosas, decidimos ir buscando un regalo para un miembro de nuestra familia muy católico.
Levemente diferente a las iglesias católicas, ya que por un cerco no se podía llegar al altar y las imágenes eran diferentes a lo acostumbrado. Es una clásica iglesia rusa ortodoxa. Su arquitectura es preciosa y su imagen de Jesús en el vitral sobre la entrada sosteniendo una biblia en japonés es… desconcertante.
Ya bajo el agua, llegamos a Akihabara. Como muchos sabrán, el centro del Otaku, el Anime, Manga, tecnología y ñoñadas afines.
Para continuar con la temática del día, nos recibe un enorme cartel de Rei.
Pasamos un largo rato en Yodobashi Camera, local, edificio de unos 9 pisos y 2 subsuelos… Aparte de cubrirnos de la lluvia, Yodobashi es definitivamente un lugar para perder la noción del espacio-tiempo.
Encaminándonos hacia nuestro próximo destino necesario: Mandarake.
Las Tiendas Mandarake, por si alguien no sabe, son tiendas dedicadas a la venta de anime, manga, figuras de acción, comics, etc. La sucursal de Akihabara no es fácil de encontrar. Lo llamativo es que cuando pedimos indicaciones, la gente no sabía qué le estábamos preguntando.
Por suerte, con lluvia y todo, pudimos cruzarnos con una “cosplayer” repartiendo volantes que además nos indicó cómo llegar.
¡Y llegamos! Como todo en Japón, 8 pisos de puro Mandarake.
No sabemos si se podían sacar fotos dentro pero sacamos alguna de contrabando.
Parece estar muy de moda armar tu propia muñeca comprando las partes por separado. Piezas del cuerpo, pelucas, ropas, ojos simulando personajes de anime. Las muñecas suelen tener un tamaño de unos 50 cm a 1 metro aprox. Los precios de las partes eran una locura.
En la Estación, como en muchas, hay un sector de estilo shopping. Había una exhibición de figuras de diferentes anime. 😉
Las fotos son malas (las sacamos con el teléfono a falta de batería en cámara).
2 Comments
Guille Danito
No puedo leer este blog, me tengo que ir a japon con 1 millon de dolares. Y no podes…….el mejor, el unico, el gigantesco castillo de metal, mazinga zeto, haciendo el breast of fire!.
Federico
No quiero echar leña al fuego Guille, pero si hubieses visto la colección de Mazinger de los 80 que había en Mandarake, dejabás un riñón. Boss, Afrodita, Minerva, Mazinger, de varios tamaños, pero había unos de unos 50 cm con caja ochentosa muy copados. Salían una fortuna, junto con algunas cosas de star wars era de lo más caro del local, creo.